Núcleo 4. Conciencia ecológica

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Narrado por Jorge Obregón

Narrado por Jorge Obregón

Una obra como Planeta herido (1963) demuestra cómo, desde principios de los años sesenta, la producción de Rahon empezó a ser más explícita sobre cierta conciencia ecológica. Su trabajo, a partir de esa década, demuestra una disposición contracultural en línea con varias demandas sociales que se del planeta, como una mayor preocupación por el estado del medio ambiente. Sus retratos de animales, de su afecto hacia estos seres, empezaron a convivir en ese momento con imágenes ambiguas que, por  pueden referirse al ciclo natural de la vida mientras que, por el otro, podrían representar una debacle  producto de la actividad humana. Algunas de las piezas que pueden contener esta ambigüedad son llamas (1975) y Pelícano muerto (1975). Esta última obra podría señalar la intención de la artista de propias palabras, “la fragilidad y lo efímero de las cosas bellas” en su trabajo así como de revestir su obra cierta función simbólica, “como escapulario contra el daño que el hombre hace a la naturaleza”. Pelícano muerto, además, permite ver giros formales a lo largo de los años de su producción. Para la década de setenta, y sobre todo en los trabajos que presentó en su última exposición individual en la Galería de Arte Mexicano en 1975, Rahon retomó el uso de objetos cotidianos y estrategias cercanas al collage